domingo, 30 de agosto de 2009

POTENCIA TORTILLERA

De CAZADOR DE STENCILS


Guarda chicas, que se vienen con todo. Y guarda hombre también, pero menos...

viernes, 28 de agosto de 2009

EJERCICIOS DE LA IMAGINACIÓN III

- ¿Qué quiere que le diga Medina? Esto de ponerse a escribir sin una idea fija no me parece de lo más atractivo que digamos, pero bue...

- Susan Boyle tampoco era muy atractiva, y mire por donde quedó ahora.

- Desintoxicándose en una clínica, con un poco de fama, con mucha plata y llena de ofrecimientos, hasta para hacer una película porno.

- O sea... uno escribe sin una idea fija y puede terminar en una película porno. Me gusta eso..

- Usted siempre con eso del sexo, siempre con la idea fija.

- ¿Pija dijiste?

- ¿Vió que tengo razón?

- Si, pero no. O sea, yo quiero que, mi película porno se vea por el Canal Encuentro.

- Lo único desnudo que pueda verse en el canal Encuentro es un documental sobre etnias aborígenes.

- Bueno, una película porno que tenga como argumento una orgía entre etnias aborígenes y que pueda estrenarse en el Canal Encuentro, en el horario de protección al menor claro.

- No sea iluso Medina que a esta altura, más que horario de protección al menor debería haber un horario de protección al mayor. Somos nosotros los que nos espantamos las cosas mientras ellos se les cagan de risa en la cara.

- Es la formación cultural que nos dan. Más avanzamos, más carceles interiores tenemos. Eso de la liberación o la sabiduría es simplemente salir de una cárcel para salir en otra. De jóvenes vivimos en la cárcel de las utopías, de viejos chotos, nos volvemos conservadores y esa es la otra cárcel. Y lo que decimos libertad, no es sino otra cárcel con los barrotes demasiados alejados, cosa que no los veamos y tengamos esa sensación de libertad.

- Tomá pa vos. ¿Y usted se va a creer más libre por participar en un porno que sea pasada en el canal encuentro travestida de documental etnico?

- Echarse un polvo y disfrutarlo, siempre es lo más cercano a la libertad absoluta.

lunes, 24 de agosto de 2009

SINCRETISMOS MATEROS

¡Yo, Ganesh, cebo!
- Tá medio amargo che, queraí Buda...
- Y eso que no le puse brote de bambú

- Ahora sí tá rico che culiádos
- Ché Ganesh...dame vuelta la trompa...
- ¿Vieron que el mate es la verdadera religión de los pueblos?
- Así es muchachos, lástima que se terminó la yerba.
- No sapa nada loco, ahora nos fumamos los sahumeritos que nos ofrendó el Mariano ujujuu

jueves, 20 de agosto de 2009

COMPOSICIÓN. TEMA: LA VACA

No tuve la suerte de tener en la escuela una señorita que me diera para componer el superconocido tema argentino de composición narrativa en la escuela primaria: LA VACA. Así que hoy lo voy a hacer. No se si sería lo que hubiera escrito cuando niño, así que lo escribo a mis treinta, antes de que se me vaya del todo mi niño frustrado por no haber hecho tal composición:

Una vez, años atrás, le dije a una de esas personas amantes de los animales que lloran cuando uno les dice que comió una parrillada que las vacas son los animales más inexpresivos que hay. La persona en cuestión me exclamó sufriente ¡Ay, no pobrecitas, si con esos ojos te lo dicen todo! Luego de eso, cada vez que podía, me la pasé mirando largamente los ojos de cuanto vacuno se me cruce por el camino. Y no. No he podido hallar aunque lo hubiese querido, una base sustentable para dar fe de la expresión de mi anterior codialogante. Ergo, sigo pensando que la mirada de una vaca - entendida en sentido amplio- no me genera ninguna cosa. Es ver esos ojos...y nada. Esos ojos no me inspiran nada en absoluto. Y lo más cercano que puedo sentir es una mirada curiosa de un cuadrúpedo curioso que a través de su mirada no me expresa NADA. La vaca puede estar mal por que la dejó el toro y su mirada no nos dirá NADA. La vaca puede estar dolorida de sus tetas por el chupeteo de la bomba y su mirada nos dice NADA. La vaca tiene ganas de comer "moha y alfa" o quizás feed lot pero a través de su mirada no podremos saber qué es lo que quiere. La vaca puede estar por morirse empastada y hasta que revientan o las vemos volando por los aires como zeppelines no sabemos NADA de eso, y menos por su mirada. Y si aún así, un decreto imperial me obligase a tener que decidirme acerca de qué sentimiento me inspira la mirada de la vaca y esté prohibida la opción de decir "NADA" y si por rebelarme quisiera decirle y ello me valiera la muerte, mas como elegir morir por una vaca no vale la pena, entonces, para salvar mi pellejo diría que la vaca, a través de su mirada me inspira honda congoja y profundo pesar, su mirada me inspira ese concepto psicológico de la "perdida" de una existencia a la cual para su plenitud le falta algo. Veo un alma quebrada, un corazón partío, un leve hastío suspirante, un cierto estado abandónico y eso de "vivir para al fin morir". Un dejo de elegía, un ocaso amargo, un canto de crespín, un aullido de lobo. Eso es lo que diría que veo en los ojos de una vaca. Pero por supuesto, diría esto si, como dije, estuviera obligado por un decreto imperial que me impediría el NADA como respuesta sin consecuencias sobre mi propia vida. Nadie está con ganas de morirse por una vaca. No obstante, ¡Cuántas vacas morimos para vivir! Y recuerdo, cuando pequeño, miraba a través del viejo Toshiba año 82 ese morboso programa que tenía Brigitte Bardott donde mostraba los métodos de los mataderos modernos para matar a los vacunos que luego consumiríamos, toda una puesta en escena para que nos espantemos, nos conmiseremos y quizás, convencernos de hacernos vegetarianos. Afortunadamente era muy pequeño, el programa estaba tarde y a la mañana siguiente debía levantarme temprano para ir a la escuela, por lo cual, aunque hubiera tenido ganas, nunca pude mirar ese programa y no me hice vegetariano, como las vacas, que ahora ni siquiera son vegetarianas por que le dan toda esa porquería del feed lot que hace que las vacas sean "de balcón" y vivan en monoambiente, cosa que las hace caminar poco y, por lo tanto, eso hace que su carne sea muy parecida a la del cerdo, lo cual es muy fuchi feucho. Ver una vaca con su mirada de NADA y masticando forraje, me hace pensar que está bien matar a las vacas para alimentarnos, por que Dios las hizo inexpresivas y vegetarianas para que no sintamos compasión al matarlas y para que ellas no nos coman en represalia por nuestro vaquicidio. Es por esto que pienso que los vegetarianos son tipos que entienden muchas cosas, pero al revés, siendo vegetarianos se parecen mucho a las vacas y con el tiempo, también terminarán comiendo feed lot como ellas - si ya no lo están haciendo - y nos los comeremos. Recuerden a Locke, homo hominis lupus - o sea, este tipo dejó las vacas por la cerveza y sólo de esa manera pudo ver amor en los ojos de una vaca.

Y termino hablando de esas personas de las cuales hablé al principio. Esos amantes de los animales que se desmayan cuando uno les habla de "carne" en las comidas. Como soy muy morboso, les hablo del ejemplo más tierno: un conejito.Un conejito que será hecho con papas, arvejas y zanahoria. Un conejito como un pompón, blanco, níveo, de rojos ojitos, que será masticado por nuestra fauces. Ya al término de mi descripción, esta persona está entre violeta y verde musgo, con los ojos desorbitados y yendo al baño. A veces les hablo de parrilladas, achuras, chinchulines, tripas gordas y sesos. Todas cosas de ese animal tan útil y tan rico que es nuestra patriota y argentina vaca. Y yo pienso, señorita, que en el fondo, esa persona se lo tiene merecido, por darle demasiada importancia a los sarcasmos que uno dice, y a mi me gusta hacerles eso. Yo sé que la persona no me mira con buenos ojos, pero basta que me digan "pobres animalitos" para que yo me despache hablando de las sabrosas virtudes y los grandes placeres que nosotros, los carnívoros, nos damos sin culpa alguna por que en el fondo ¿Qué nos importa el dolor ajeno si nuestra panza está llena? NADA, igual que nos pasa cuando miramos a los ojos de la vaca.

FIN

lunes, 17 de agosto de 2009

GANAS

Cada vez creo menos en las cosas que se hacen sin ganas, más bien, desconfío de las cosas que se hacen de esa manera por que nunca van a poseer lo mejor de uno. Y creo - por que es absurdo - que si deseás algo con todas tus fuerzas, eso va ocurrir tarde o temprano. No alcanza un talento, una inteligencia brillante, una aptitud física óptima, un don de la naturaleza, una condición inigualable, una posición social favorable ni la suma del poder. Si no tenés ganas, ninguna de esas cosas tienen algún valor. ¿Cuántas de nuestras ganas quedan entre tanta presión social, entre tanto imperativo categórico? ¿Cuánto de libertad para nosotros hay aún como para ser lo suficientemente libres de "las cosas que hay -debemos- hacer sin sentír un factor culpógeno que como una rata hambrienta nos devora los pies para hacernos caer?

Raros tiempos éstos, enrarecidos, más bien. Me da la sensación como de que nos quieren anestesiar para que no pataleemos para extraernos las ganas, esas, las nuestras, las que tenemos vos, yo y todos. Entonces es necesario resistir, practicar la mayéutica para volver a encontrarnos con lo que el Leteo de esta época se empeña en que olvidemos.

No creo en casi nada, que no venga del corazón.-

miércoles, 12 de agosto de 2009

LO ARTESANAL JAJAAJAJ

La cosa ya la había anticipado en un video realizado en colaboración con Don Jokerman y censurado por la sinarquía hippie del barrio Pinchincha. Ese video causó tal estupor entre la comunidad de feriantes findesemaneros que hasta la fecha omito salir a la calle con el gorrito - tiara de lana tricolor que mi hermana me tejiera por temor a que me reconozcan por la calle y usen mi piel para hacer pantallas para veladores que, a precio euro, se llevarán unos turistas europeos a sus pagos natales.

El tema que traté aquel entonces y que hoy vuelvo a tratar es el bastardeo con fines comerciales de la palabra "artesanal". Uno siempre suele hacerse la idea de que algo artesanal está elaborado a través de un proceso en lo cual lo esencial de su producción está dado por la mano del hombre que lo fabrica conforme a ciertas reglas de producción por él establecidas en la cual, cada objeto producido tiene una dedicación exclusiva y personalizada. O sea, todo lo contrario de la elaboración "en serie" nacida a la luz de la industria automotriz estadounidense de la mano de Henry Ford - como será que hasta hay un modelo de producción demonimado "fordismo" - Con el pasar de los años la producción en serie se volvió gracias al progreso tecnológico el sine qua non de la producción mundial, ergo, muy pocas cosas hay que no se produzcan en serie en estos tiempos y muy pocas cosas hay que sean, realmente "artesanales" en el sentido propio y fidedigno. Pero hoy, tiempos modernos donde hay que vender para crecer y progresar para existir, a alguno, en su loca cabeza impregnada de ánimo de lucro se le dio por adjetivar a una determinada producción de "artesanal". Entonces, desde ahí podemos escuchar en algún medio "Pastas Nonna Angiulla - elaboración artesanal". Salvo que la vieja sea una adicta al palote de amarsar poco dable es imaginar a la Nonna estar todo el santo día amasando tallarines que se pueden adquirir con esa marca en todos los mercados de la región, por que, digámoslo ya que no es ningún secreto, que las pastas de la nona están hechas en grandes máquinas hacedores de tallarines. Y esto es un ejemplo, repito, tenemos dulces "artesanales" que tienen más ácido ascórbico y colorantes que una petroquímica. Tenemos dulce de leche "artesanal" de La Serenísma. Y basta recorrer el supermercado para ver que encontrará facilmente muchos productos de elaboración "artesanal". Con ese mismo criterio aquellas cosas "light" al ser "light" poseen más valor agregado que una cosa "no light" ergo, serán más caras por que "no engordan". Si nos ponemos a pensar, debe ser más caro lo que tiene más valor calórico y proteico que aquello que no lo tiene puesto que lo "light" nos alimenta menos, sólo se justificaría por el hecho de agregar un eslabón más al proceso productivo para hacer "light" lo no light.

Es constante en estos tiempos, adjetivar cosas para querernos sacar más la guita. Lo "artesanal" lo "light" "lo "reducido en calorías" lo "sin colesterol" - sobre todo en los aceites vegetales que así se denominan siendo que el colesterol proviene de los animales - el "ele caseis defensis" la proteína "símbolo del alfabeto griego que desee" que tiene su yogurt. Y un largo etcétera.

Esto de denominar "artesanal" a las cosas no artesanales no es un arte sano, sino la enfermiza necesidad de ensalzar ladinamente un objeto para que valga más. Esto no es, sino, una forma más de la famosa "truchada" argentina. Vengan a venderme una wii de "elaboración artesanal". Pst....


sábado, 8 de agosto de 2009

NIÑO EN PUÑO

Cuando sus pensamientos decidieron dejar de atormentarlo, logró notar con cruda perplejidad la ferocidad de la fuerza que comprimía en sí mismo el puño de su mano derecha. Carne y hueso estrujándose a sí misma. Ardiente energía liberada convergiendo allí, como lo hacen las quebradas bifurcaciones de relámpagos que se dirigen al metal que lo atrae pero a diferencia de aquellos, la energía de esa mano a nadie alumbraba, ni siquiera a la usina que la provocaba.

Respiró hondo para distenderse y aprovechar el breve lapso que sus reflexiones le otorgaron piadosamente a su alma. Depositó sobre el respaldo del asiento mullido y polvoriento todo el peso de su nuca y su espalda. En su inhalación tragó algo más que oxígeno: el tufo empolvado del ambiente era una fragancia pestilente hecha con las diversas notas aromáticas despedidas por los pasajeros del ómnibus: crudeza penetrante de sobacos proletarios, acidulados matices del estrés post laboral propios de los empleados de oficina, juguetón erotismo hormonal los adolescentes que retornaban de sus colegios, aliento a remedio y sopa de los ancianos del primer asiento, el perfume dulce de la hermosa chica universitaria del asiento de adelante, la aspereza del polvo terrestre que flotaba dando cuerpo a la luz solar.

Tragó en ese respiro varios fragmentos de los historiales de los demás viaje-ros mezclándolos de puño y letra en un párrafo odioso y olvidable de su propia biografía. Letra inscrita rudamente en la lisura pálida de una de las tantas hojas en blanco que tenía su alma. Llenó sus pulmones hasta que no pudo caber en dentro de ellos un solo átomo más. La caja torácica era un voluminoso dirigible de carne con más pretensiones de estallar que de mandarse a mudar en vuelo hacia el cielo hirviente que se dejaba ver desde la ventanilla. Un segundo, dos, tres, tres más, seis, doce…

Exhaló por la boca y por la nariz, al principio con suavidad, emitiendo un suspiro largo y silbante, evacuando de su cuerpo el rancio microcosmos circundante que había deglutido. De esos orificios salían expulsados sin intermitencias, los historiales, los hedores, las hormonas, los cansancios, todo aquello que había inhalado anteriormente. Todo salía por el mismo lugar por donde había entrado, pero cada cosa salía mutada, diferente, envenenada del veneno destilado en sus alvéolos. Ahora, el leve suspirar se volvió una tempestad que arreciaba desde su interior portando en su fluir una electricidad desquiciada y corrupta que contaminaba el ya infestado interior del ómnibus que a esa altura, ya era un catálogo horrendo de perfumes repelentes. Obedeciendo a un imperativo categórico lo expulsó todo, hasta no tener atisbo alguno de ese éter escrofuloso en su interior. Su cerebro, un chip vetusto con sus circuitos desdibujados, ordenó lo mejor que pudo a sus párpados “arriba”. Ellos obedecieron remolonamente dando paso a dos globos oculares enrojecidos y lastimosos que insistentemente buscaban el centro de ese sol aglutinante de la media tarde estival. El dolor del fuego lo obligó a mirar hacia la ventanilla, donde una progresión de verdes arboledas y suntuosas casas quintas se sucedían las unas a las otras sin solución de continuidad. En ese transcurrir veloz llegó a ver a gente como él que no sufría el despotismo de las vacilaciones, de los silogismos tortuosos, de aporías sentimentales, de juicios hipotéticos, verdades erradas y futuros desdibujados. Esa gente parecía en ese momento poder disfrutar de sí mismas, podían olvidarse un instante del yugo de su existencia, del padecer del existir, los envidiaba, no hacerlo significaba ser un santo. Volvió a sí mismo, a ser su propio objeto de reflexión. Recordó sus ojos, sus ojos dolidos le recordaron a él mismo a través del dolor que experimentaban por la osadía de querer mirar la luz de esa pelota incandescente que fulgura y que da vida. Miles de puntos negros navegaban imaginariamente entre lo que podía ver y sus ojos mismos. Se mordió el labio inferior lamentando esa torpe actitud masoquista consigo mismo.

Cuando los puntos negros se fueron, miró detenidamente su mano que ahora estaba abierta de par en par, transpirada y caliente. Examinó afanosamente el dorso de su mano las venas enrojecidas por la tensión ya pasada, las marcas de las uñas en la zona media de la palma, las líneas de las manos que ninguna gitana leyó jamás, sus huellas dactilares, quizás lo único que genuinamente tenía de propio e irrepetible – creía de sí mismo-. En ese momento el universo audible del exterior cesó, nada de voces de otros, nada de motor, nada de viento chiflando en los resquicios del chasis. Otro plano audible surgió, un espacio acústico íntimo y frío que se impuso sobre el normal para todos. Solo un ruido flotaba en ese éter. Era una voz infantil que se reproducía a sí misma en insumables ecos resentidos y agudos. Esa voz provenía desde un ángulo imposible de esa geometría hostil, de ese plano egoísta y tétrico. Esa voz tenía un destinatario definido, él mismo, y aunque lo desease fervientemente, no podría ser sordo a esas palabras que le decían severamente:

“En este puño estoy yo, estas vos, niño, adulto, estoy yo, tu, niño cruel. El sol que veo, que ves, que vemos está tan amarillo que le siento, que le sientes olor a azufre. En mi puño estoy yo, estas vos, yo niño cruel tu, adulto niño, tu niño cruel. Mis, tus palmas, las yemas de mis, tus cinco dedos sienten, sientes nuevamente aquella misma sensación de cuando tenia cinco años y aplasté aplastaste en mi, tu puño una cucaracha gorda y negra, siento, sientes nuevamente aquella porquería amarilla esparcirse por mi, tu mano nuevamente. Recuerdo, recuerdas si, que había, habías puesto a la vieja odiosa de mi, tu vecina en el interior de esa cucaracha. Y la aplasté, la aplastaste con fuerza, mucha fuerza, a todo lo que daba. Puedo, puedes escuchar otra vez el crujir de todo el cuerpi-to del animal. La tibieza de la porquería que estallaba de la panza de la cucara-cha. Sentía, sentías a mi, tu vecina morir y morir y morir. Si, los niños somos crueles, eres cruel. Yo, tu niño nunca me fui. Estoy, estás en mi, tu mano, en-cada vena, en cada marca de cada uña de mis, tus dedos. ¿Los ves? Forman el rostro que tengo, que tuviste cuando niño, que aún tienes. Soy tu niño, de vuelta, aquí contigo. ¿Sabés algo? Los niños somos luminosos soles diabólicos que nunca dejarán de quemarte si nunca los dejaste amanecer alguna vez. Que nunca te dejarán salir si no los dejaste ir al parque, que te amargarán la vida si nunca los endulzaste con un caramelo. Si nunca les diste un lugar, ellos se lo harán solos. Irán a morar a lo hondo de tu cerebro. Y un día cualquiera, por ejemplo, este día, volverán por el mismo camino, tan rápida e imprevistamente que no te darás cuenta de que han vuelto sino hasta que notes que tenés una de tus manos cerradas con todas tus fuerzas estrujando nadas, y en el peor de los casos, con tu mano sangrando y otra mano en el suelo inmóvil y fría en el suelo, al igual que el cuerpo que la acompaña, otro cuerpo que no es el tuyo. Soy una araña y vos mi mosca, sos tu juez y sos el reo, soy la araña, vos la mosca, soy la mandíbula hambrienta y filosa, vos sos mi banquete”.

El ómnibus frenó bruscamente, casi atropella a un perro distraído. Él se hallaba transpirado y con el corazón sin freno y sin consuelo. El colectivo siguió su marcha – “Perro pelotudo”- bramó el guaso del chofer. Su mano era un autorretrato inesperado. Como una instantánea de mil crueldades de una edad inocente, vio en ese rojo latir un pergamino antiguo que decía “Dame un caramelo, dame un parque, abríme la puerta, déjame jugar”. El niño, su niño cruel volvía cada vez que el puño se cerraba y se mostraba cada vez que se abría con estas sentencias, una y otra vez.

El ómnibus llegó a la terminal. Al bajar, comenzó a soplar un viento fresco del sur. Cercanía de lluvia purificadora de almas. Viento sur, que todo se lo lleva dando lugar un clima limpio y respirable. Comenzó a caminar pensando:

“Aquí me tengo a mí, reflejado en mi propia carne adulta e inexperta, extraviado en mi adultez, un laberinto eterno, un juego sin final. Mi niño, yo, mi verdugo, mi reo, ha, he venido a mostrarme, me muestra, me muestro, por enésima vez la sentencia. No podía saberla me dice que podía, no debía saberla, me dice que debía saberla era mi, su condena, la de su, mi inocencia, la que tenía que sufrir, la que tengo que sufrir. Ser adultos es ser culpables. El niño te lo dice, el niño me lo dice, si no lo oyes, si no lo oigo, te, me lo recuerda. Si no lo oyes, te cierra el puño y cuando lo abres, llamea en tus venas. Nunca lo dejé salir siempre prisionero, nunca le di un dulce, siempre yo, tan amargo, nunca un amanecer, levantarse en la medianoche. El niño reclama lo que siempre deseó, lo que siempre le, me negué. Hora de abrirle, de abrirme la puerta para ir a jugar.”

Comenzó a llover, sus lágrimas se confundían con la lluvia refrescante.

jueves, 6 de agosto de 2009

CANCIONES

MARIANVS dice:

*son rachas como quien dice, a veces te pega el bajón y no sabés por qué
*y me pasaba de escuchar "vuelos" de la bersuit y emocionarme
*otras canciones desatan una euforia grande como "sinfonía agridulce"
*otras ganas de romper todo, en fin, uno suele asociar canciones a estados de ánimo
*no sabemos por qué , pero algunas canciones logran explicarnos.

Esto es parte de una conversación con un amigo. Podría elaborarse un poco, pero creo que se entiende así como está.

ANDY CHANGO - VIVA EL PROGRESO

Y entonces el año pasado el Señor Chango se puso a investigar la vida de Boris Vian, sacó un disco homónimo y puso como primer tema este hermoso tema.

miércoles, 5 de agosto de 2009

FOTOS DE ZULMA LOBATO DESNUDA. VIDEOS DE ZULMA LOBATO. DESCARGAR VIDEOS DE ZULMA. ZULMA LOBATO EN BOLAS

Visto en la calle en un cartelón negro apoyado sobre un poste de luz
(Eva Perón al 7500 ponéle). No puedo sacarle fotos por que el bondi no para en ese lugar.-

VENDO SÁBALOS

Inmunes a la gripe A
Vacunados contra el dengue

a 50 metros
















(Qué lindo seria ver a los que buscan cosas de Zulma Lobato mirando esto)