sábado, 26 de diciembre de 2009

CARACOLESFEST - BIRRA Y JARDINERIA

La Strelitzia reginae produce unas flores hermosas. Se la conoce simplemente como Flor de pájaro, Flor del ave del paraíso, Estrelicia, etcétera. Yo la conozco como Flor de pájaro a secas. Desde que tengo memoria es una planta grandota que ocupa una generosa parte del jardín de la casa de mis padres. La contrapartida de la belleza de sus flores es el tamaño pantagruélico que adquiere la planta con el correr del tiempo, cosa se que solucionaría con una poda habitual que habitualmente no se realiza. Durante el 25 para superar la abulia propia del día y con el fin de usar apropiadamente las calorías ingeridas de más, quien suscribe se dispuso a podar, tijera y hacha en mano, a la susodicha planta. Todo un día llevó la faena. Cada tallo desprendido hacia que me encontrase cara a cara con un generoso reino de artópodos y gasteropodos, por no decir bichos bolita, arañas, cucarachas, caracoles, babosas, y demás bichos.

A eso de las siete y media de la tarde terminé. La planta de flor de pájaró pasó de tener un aspecto afro a tener un aspecto punk. Terminé la obra cortando los yuyos bajo la dirección de mi padre indicándome donde había cultivado pimientos, cebollas y rabanitos para evitar que mi desconsideración botanica arrase con sus cultivos.

A la nochecita, dada la canícula imperante que originaba que ningún bicho tenga ganas de entoncar sus cánticos nocturnos madre, padre y yo nos pusimos a charlar sobre termodinámica y peinados de vecinos en la humedad del patio. Y allí , mientras mi madre me mostraba una lamparita halógena que le regalaron por comprar un libro sobre botánica al Reader´s Digest, fue que me dijo sobre cómo matar caraoles: Dándoles cerveza. "Vos poné un poco de cerveza en un culito de botella de plástico y mirá como se van a tomar cerveza" me dijo. Recordando que había una botella de cerveza negra abierta en la heladera, corgé una botella de gaseosa, le puse cerveza y la llevé cerca de la flor de pájaro. Para acelerar el proceso, junté dos caracoles que había en los tallos y observé. Los resultados son estos:


1.- Fue ponerlas cerca y pararon las antenitas

2.- Catando origen, cosecha y varietal del lúpulo

3.- Se van poniendo de acuerdo en cómo atacar el vital líquido elemento

4.- Va a la carga, al chupi directo.

5.- Muere en su propio vicio.


Después de esto advierto que estoy pronto a ser víctima de Greenpeace, de la Sociedad protectora de animales, del INADI, de la Fundación Vida Silvestre, de la ONG "Caracoles en fuga: No nos detendrán, no pasarán", de las maldiciones de San Roque, de la Logia Zoológica de Cuttini. Yo les digo que me cago en la ley Sarmiento y en ustedes. Es más, mucho tiempo atrás eramos muchos los que le dabamos cerveza a "Quilmes" aquel cuzquito que merodeaba por el under rosarino. Me hago cargo. Mi confesión es no positiva pero confesión sincera.

Oh Dios, veo que viene el Rainbow Warrior con los cantantes de Rata Blanca dispuestos a lincharme...el oso de Cutttini también NOOOOOOOOOOOOOOOOOO

9 comentarios:

Claudio Eugenio Sassaroli dijo...

Pasalo a escala humana y agregale tiempo, y se verá lo perfectamente ilustrativo que es de la conducta y consecuencia en el hombre.
PETA (con perdón de las iniciales) ya ha puesto una recompensa sobre tu cabeza.

Confesión por confesión, la crueldad hacia los bichos en nuestra infancia (la de mis amigos y mía) es algo que me pone del peor humor recordar. Se trataba de bichos, y como tales feos e insignificantes, y fingiendo inocencia queríamos creer que no sufrían y que incluso era meritorio librar la vista de aquella inmundas creaturas. Aclaro que eran caracoles también, pero con la lagartija, que en rigor encontramos agonizante, no sólo se acabó la abominable práctica -que nunca fue habitual- sino que nos convertimos al absoluto respeto hacia toda forma de vida, incluyendo las mocas que no mato, las cucarachas que en vez de pisar tomo entre los dedos y deposito afuera y cuánto trato de frenar a mi madre cuando para proteger la integridad de sus flores echa lavandina sobre los senderitos de baba.
Esa lagartija fue el colmo: creyéndola sinceramente muerta, por la curiosidad característica de los chicos, decidimos seccionarla y analizar los órganos. Al abrirle el vientre se contrajo, acaso fueran contracciones post mortem (es más, casi seguro), y tuvimos en coro un tremendo ataque de nausea que nos puso al borde del vómito. Tendríamos doce años. Nunca más.

No exagero diciéndote que acabo de confesarte mi quizás peor vergüenza, pero dado que acabás de atribuirte tus responsabilidades juzgo justo y ejemplar imitarte.
Aunque esto me haya puesto de mal humor.

LORD MARIANVS dijo...

Entre los gasterópodos y el jardín me quedo con el jardín. Con los insectos, desde pequeño jamás tuve miramientos ni los tendré actualmente a la hora de matarlos más tratándose de cucarachas.

Los caracoles han sido y son muy crueles con las plantas. Si no los cuidás pueden exterminarte el jardín. No es que quiera convertirme en el Josef Mengele de los insectos precisamente, pero no considero atentar contra la vida si extermino uno de esos bichos que se reproducen geométricamente y que de no ser porque cumplimos con nuestra parte del ciclo biológico seguramente nos sepultarían con su sola presencia y sin experimentar sentimiento de crueldad alguna.

Claudio Eugenio Sassaroli dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Claudio Eugenio Sassaroli dijo...

Si es por esto no tendría objeción, las únicas especies que se multiplican en proporción directa a la obra humana son las de insectos, plagas, microbios, parásitos y todo bicho que camina y vuela o se arrastra. Pero en la lucha contra las hormigas, que junto al hombre son las solas que hacen la guerra, terminan ganando las hormigas.
Por supuesto que si tenés un jardín cuidado das preferencia al bienestar de tus plantas, y los caracoles son el terror de las flores, les viene bárbaro cualquier verdura, desde margaritas silvestres hasta orquídeas que si sobreviven a la era glacial sucumben en cambio al lento trabajo de los babosos.

Tony dijo...

PETA autoriza usar pieles de "Pseudohominides Corruptus Politikensis", sean del Partido... perdón... de la variedad que sea...

Alyxandria Faderland dijo...

Y bueno que se joda por meterse a chupar en una bañera para su tamaño.
ahora que contradiccion, fondo verde ecologista, poda a los hachazos a la planta (no lo quiero ver!!) y el caracol finucho. contradictorio por lo menos.

LORD MARIANVS dijo...

Tony: También de "Chapoguzmaniensis narcoticus extreums".

Alyx: Es que el set de diseñadores gráficos del blog hace cierta apología de lo verde por que tiene nno sé que plantitas en el dofón y les sacan las hojitas. No, este blog, por más verde que sea, no es ecologista in extremis. Admitimos la muerte como parte de la vida misma. Lo del hacha fue por que no tenía ni machete ni la máscara de Jason. Pero quedó linda, viera usted.

LORD MARIANVS dijo...

Se publica a continuación un comentario vía mail del gran Romano:

Hola Sr. Director de "EL KRONIKON":
Acabo de leer la útima entrega de tu prestigioso medio y me gustó la crónica sobre el "caracolicidio". A los lectores desprevenidos les PUEDO GARANTIZAR QUE ES ASI. A PRUEBA DE TODA DUDA.En esta humilde casa, morada transitoria varias veces al año de LORD MARIANUS, se desarrollan experiencias de ese tipo, con resultados óptimos, por lo que se demuestra. A manera de conclusión; definitivamente el caracol es un especie dañina para varias especies comestibles, como ser lechugas, achicorias y otras verduras. Ultimamente descubrí que suelen atacar a los pimientos.
Entonces quedan dos caminos: o aprender a transformarlos en bichos comestibles (purgado-cocina de alto nivel,etc,etc.SI SI.Lean SRES LECTORES SOBRE GASTRONOMÍA PARA EXQUISITOS.
O bien, como aprendió a experimentar LORD MARIANUS, con humildes y efectivos cacharritos con cerveza.Otra que muerte por ahorcamiento, o gas, o electrocución!!!!. Muerrrrte al contado

LOS SALUDO ATTE. ABEL ROMANO. ESPERANZA

LORD MARIANVS dijo...

Y sigue el gran ROMANO:

Distinguido LORD MARIANUS:sI decide publicar mi correo anterior, y si tiene aún espacio y tiempo para hacerlo, le sugiero agregar estas líneas:
Cuál es la razón `por la cual estos bicharracos mueren miserablemente por un mínimo de cerveza?Aunque los humanos,seres superiores, decimos que los animales son seres irracionales, en realidad están sujetos a la misma enfermedad de millones de humanos;LA ESTUPIDEZ. Así como el ser humano se mata estúpidamente en las guerras, o aquí en Argentina chocándose unos a otros a 150 km. por hora en las infames rutas de los años 1.930, o por ese gesto de grandes vivos, probando, probando nomás(total que te va a hacer?) cualquier droga infame, bueno, eso hace que el caracol, se amontone como loco ante un cacharrito de cerveza y loco de estupidez se arroje al abismo.
Bueno, que se embromen!
NADA MAS, PAPÁ