EMPIRISMO DE LA METAFISICA Y UNA CUESTION AL RESPECTO

La ley de karma es perfectamente comprobable a través de las moneditas de cinco centavos. En efecto, aquel chofer que omite dar de vuelto cinco centavos, en algún momento posterior deberá resignar cobrarlos de usted o de otro. Y si usted, generosamente le dice al chofer o tachero: "dejá los cinco" es muy probable que en algún momento esos cinco centavos vuelvan a usted, si no del mismo colectivero o tachero, de otro o bien la calle se lo retribuirá.

Hasta aquí todo bien, el gran problema se plantea respecto de los cajeros/as de supermercado o almaceneros que ante la ausencia de cambio otorgan al cliente caramelitos masticables provocando en sus malhadados clientes la ausencia del metálico que debieran recibir en lugar de caramelitos que muy probablemente no deseaban recibir. Si bien en terminos de economía de mercado suplantamos resignadamente recibir el vuelto en dinero por un vuelto "en especie" (caramelitos) y en todo caso, bajo estas condiciones las partes nada se deben, no es del todo así para entablar la justicia universal que procura mantener la ley de karma, pues mucha injusticia y estafa hay en suplantar el vuelto en metálico por caramelos que, tarde o temprano derivará en una carie. Tal vez, alegaríamos que una suerte de retribución de dicha malicia sería el hecho de que optásemos por dejar de ser clientes de ese local, pero sabemos que eso, usualmente no sucede por que somos muy cómodos y no nos vamos a calentar por unas moneditas trocadas en masticables y tambien por que somos muy pajeros y no hacemos valer nuestros derechos de consumidor como corresponde y reclamar moneditas sin titubear.

Y como yo no creo que karma nos de moneditas cuando queremos pagar con caramelos me gustaría ver cómo opinan ustedes que opera la ley de karma en este caso.